Sabemos que correr es liberador, una manera perfecta de despejar la mente y mantenernos en forma. Pero, ¿alguna vez has pensado en lo importante que es preparar tu cuerpo antes y después de salir a correr? Aquí te tenemos una guía sencilla y amigable sobre estiramientos que te ayudarán a mejorar tu rendimiento y evitar lesiones.

Antes de Correr: Estiramientos Dinámicos

Antes de lanzarte a la aventura de correr, es vital calentar los músculos con estiramientos dinámicos. Estos movimientos ayudan a aumentar la circulación y preparar tus músculos para la actividad.

1. Balanceo de Piernas

Este estiramiento es genial para activar tus músculos. Simplemente, párate sobre una pierna y balancea la otra hacia adelante y hacia atrás. Repite 10 veces por pierna. Este movimiento ayuda a flexibilizar los músculos de las caderas y las piernas.

2. Círculos de Cadera

Párate con los pies separados a la altura de los hombros y coloca tus manos en las caderas. Gira las caderas en círculos grandes, primero en un sentido y luego en el otro. Haz 10 repeticiones por cada lado. Este estiramiento es perfecto para soltar las articulaciones y los músculos de la cadera.

3. Rodillas al Pecho

Marcha en el lugar, levantando las rodillas hacia el pecho lo más alto que puedas, incluso puedes apoyarte de alguna superficie. Hazlo durante 1-2 minutos. Este ejercicio activa los músculos de las piernas y mejora la movilidad de las caderas.

Después de Correr: Estiramientos Estáticos

Una vez que hayas terminado tu carrera, es momento de estirar los músculos para evitar la rigidez y mejorar la recuperación. Aquí te dejo algunos estiramientos estáticos esenciales.

1. Estiramiento de Cuádriceps

Párate derecho y dobla una pierna hacia atrás, sujetando el pie con la mano. Mantén la postura durante 20-30 segundos y cambia de pierna. Este estiramiento ayuda a relajar los músculos del muslo y mejorar la flexibilidad.

2. Estiramiento de Isquiotibiales

Siéntate en el suelo con una pierna estirada y la otra doblada, con el pie tocando el muslo de la pierna estirada. Inclínate hacia adelante intentando tocar los dedos del pie estirado. Mantén la posición durante 20-30 segundos y cambia de pierna. Este estiramiento es crucial para mantener los músculos de la parte trasera de las piernas en buen estado.

3. Estiramiento de Gemelos

Apoya las manos contra una pared y coloca una pierna adelante con la rodilla doblada y la otra atrás con la rodilla estirada. Empuja contra la pared y siente el estiramiento en el gemelo de la pierna trasera. Mantén durante 20-30 segundos y cambia de pierna.

4. Estiramiento de Cadera y Glúteos

Acuéstate boca arriba, cruza una pierna sobre la otra formando un cuatro, y tira suavemente de la pierna de abajo hacia tu pecho. Mantén la posición durante 20-30 segundos y cambia de pierna. Este estiramiento es ideal para soltar la tensión acumulada en las caderas y glúteos.

Tips Extras

  • No te olvides de respirar: Mantén una respiración constante y relajada durante los estiramientos. Esto ayuda a relajar los músculos y aumenta la efectividad del estiramiento.
  • No fuerces el estiramiento: Si sientes dolor, retrocede un poco. Estirar debería ser cómodo y nunca doloroso.
  • Hazlo parte de tu rutina: Los estiramientos son tan importantes como correr. Dedica al menos 5-10 minutos antes y después de correr para estirar.

Esperamos que estos consejos y rutinas te ayuden a mejorar tu experiencia de running y mantener tu cuerpo en óptimas condiciones.

¿Tienes alguna rutina de estiramiento favorita? ¡Compártela con nosotros en nuestras redes sociales!

¡Nos vemos en la pista!

Hoy, en honor al Día Mundial del Medio Ambiente, queremos hablar sobre cómo una de nuestras pasiones favoritas puede marcar la diferencia.

1. Reducción de Emisiones:

El running tiene un impacto positivo en la reducción de emisiones de carbono debido a que es una actividad que no requiere el uso de medios de transporte motorizados. Al correr, no se emiten gases contaminantes ni se consume combustible fósil, lo que contribuye a disminuir la huella de carbono

Optar por correr en lugar de utilizar vehículos motorizados ayuda a reducir la contaminación del aire y a preservar el entorno.

2. Conciencia Ambiental

Los corredores pasamos mucho tiempo al aire libre, explorando senderos naturales y parques urbanos. Esta conexión con la naturaleza nos hace más conscientes de la importancia de proteger el medio ambiente. Cuando vemos la belleza de un amanecer en el bosque o el resplandor del sol sobre un lago, nos inspiramos para cuidar y preservar estos espacios naturales para las generaciones futuras.

4. Carreras Ecológicas

Cada vez más, quienes nos dedicamos a cronometrar y organizar carreras, estamos adoptando prácticas ecológicas para reducir el impacto ambiental. En nuestro caso, utilizamos equipo y tecnología de nuestro partner MyLaps; empresa avalada como Carbon Neutral Company, transformando las carreras en eventos más sostenibles.

5. Inspiración para un Estilo de Vida Saludable y Sostenible

El running no solo beneficia al medio ambiente, sino también a nuestra salud y bienestar. Al adoptar un estilo de vida activo y saludable, inspiramos a otros a hacer lo mismo. Cuando compartimos nuestra pasión por correr y cuidar el planeta, estamos creando un impacto positivo en nuestra comunidad y en el mundo.

Cada paso que damos nos acerca un poco más a un mundo más limpio, verde y saludable. Así que la próxima vez que salgas a correr, recuerda que estás haciendo algo más que ejercitar tu cuerpo: ¡estás corriendo por el planeta!

Correr es una actividad física tan versátil que puede adaptarse a una variedad de terrenos, desde el asfalto de la ciudad hasta senderos naturales accidentados.

Explorar diferentes superficies no solo añade variedad a tu rutina de entrenamiento, sino que también puede ofrecer una serie de beneficios físicos y mentales. Sin embargo, correr en diferentes terrenos presenta desafíos únicos que deben ser considerados para maximizar el rendimiento y prevenir lesiones.

En este artículo, exploraremos los beneficios de correr en distintos terrenos y las consideraciones importantes a tener en cuenta.

Beneficios de Correr en Diferentes Terrenos:

  1. Diversificación del Entrenamiento Muscular: Correr en diferentes superficies estimula una variedad de grupos musculares. Por ejemplo, correr en terrenos blandos como la hierba o la arena requiere una mayor activación de los músculos estabilizadores, fortaleciendo así todo el cuerpo de manera más completa que correr exclusivamente en pavimento.
  2. Mejora de la Estabilidad y el Equilibrio: Correr en terrenos irregulares, como senderos forestales o colinas, desafía constantemente la estabilidad y el equilibrio del corredor. Esta adaptación mejora la propiocepción y reduce el riesgo de lesiones relacionadas con la falta de estabilidad.
  3. Menor Impacto en las Articulaciones: Superficies más blandas, como la tierra o el césped, absorben parte del impacto generado por cada zancada, lo que puede reducir el riesgo de lesiones por sobreúso, especialmente en las rodillas y las articulaciones.
  4. Estimulación Mental y Sensorial: Correr en entornos naturales proporciona una experiencia sensorial más rica en comparación con las calles de la ciudad. La conexión con la naturaleza puede reducir el estrés, mejorar el estado de ánimo y aumentar la motivación para correr.

Consideraciones Importantes:

  1. Ajuste del Calzado: El tipo de terreno influye en el tipo de calzado más adecuado. Para terrenos blandos y naturales, se recomienda un calzado con mayor tracción y amortiguación, mientras que para superficies duras como el pavimento, se prefieren zapatillas con buena absorción de impactos.
  2. Gradualidad en la Transición: Si estás acostumbrado a correr en un solo tipo de terreno, es importante introducir gradualmente nuevas superficies en tu rutina para permitir que tu cuerpo se adapte y reducir el riesgo de lesiones por sobreúso.
  3. Evaluación del Terreno: Antes de correr en un nuevo terreno, es importante evaluar la seguridad y la dificultad del mismo. Presta atención a factores como la inclinación, la estabilidad del suelo y la presencia de obstáculos para evitar lesiones.

¡Así que sal ahí fuera y explora los múltiples caminos que el running tiene para ofrecer!

Estos apasionados guías nos llevan más allá de nuestros límites, nos motivan cuando las piernas flaquean y nos enseñan a amar cada paso. En honor al Día del Maestro, queremos rendir homenaje a estos maestros de la pista.

1. Conocimiento y Experiencia

Nuestros entrenadores no solo saben cómo correr rápido; también entienden la biomecánica, la nutrición y la psicología del deporte. Su conocimiento es una mina de oro para nosotros. Nos enseñan a mejorar nuestra técnica, a prevenir lesiones y a mantenernos fuertes. Sin ellos, estaríamos perdidos en un mar de información contradictoria.

2. Motivación Inquebrantable

¿Alguna vez has sentido que no puedes dar un paso más? Los entrenadores son expertos en sacar lo mejor de nosotros. Nos animan cuando las piernas tiemblan, nos recuerdan por qué corremos y nos empujan a superar nuestros límites. Son como ese amigo que te dice: “Vamos, solo un kilómetro más”.

3. Comunidad y Apoyo

Los entrenadores crean comunidades. Nos unen con otros corredores, nos hacen sentir parte de algo más grande. En sus grupos de entrenamiento, compartimos risas, sudor y metas. Nos apoyamos mutuamente en las buenas y en las malas. Porque correr no es solo una actividad solitaria; es una aventura compartida.

4. Inspiración Constante

Los entrenadores no solo nos enseñan a correr; también nos inspiran a vivir una vida activa y saludable. Sus historias de superación, sus propios logros y su pasión por el deporte nos impulsan a seguir adelante. Son faros de luz en nuestro camino, recordándonos que cada paso nos acerca a nuestros sueños.

5. Gratitud y reconocimiento

En este Día del Maestro, tomemos un momento para agradecer a nuestros entrenadores. Porque sin ellos, no seríamos los corredores que somos hoy. Así que, desde lo más profundo de nuestros corazones, ¡gracias, entrenadores!

¿Quieres darle un impulso a tu entrenamiento y mejorar tu rendimiento en la pista? ¡Entonces los entrenamientos de intervalos son tu mejor aliado!

Descubre cómo puedes incorporarlos fácilmente en tu rutina de running.

Primero, ¿qué son exactamente los entrenamientos de intervalos? Bueno, básicamente consisten en alternar entre períodos de alta intensidad y períodos de recuperación activa o descanso.

¿Por qué deberías agregar intervalos a tu rutina? La respuesta es simple: ¡te hacen más rápido y más fuerte! Estos entrenamientos desafían tu cuerpo de formas que el running continuo no lo hace. Te ayudan a aumentar tu capacidad aeróbica, mejorar tu resistencia y aumentar tu velocidad. Además, ¡queman más calorías en menos tiempo! ¡Es como el combo perfecto para alcanzar tus metas de running!

Ahora, hablemos de cómo incorporar estos intervalos en tu rutina. Primero, determina tu objetivo. ¿Quieres mejorar tu velocidad en distancias cortas o tu resistencia en distancias más largas? Una vez que tengas claro tu objetivo, elige el tipo de intervalos que se adapte mejor a tus necesidades. Puedes optar por sprints cortos, intervalos de tempo, o incluso hacer hill repeats si te sientes aventurero.

Luego, planifica tu sesión de entrenamiento. Empieza con un calentamiento adecuado para preparar tus músculos para el esfuerzo que se avecina. Después, realiza tus intervalos, alternando entre los períodos de alta intensidad y recuperación. No te olvides de mantener una buena técnica de carrera y escuchar a tu cuerpo. ¡El dolor de esfuerzo está bien, pero el dolor de lesión no lo es!

Finalmente, no te olvides de enfriar adecuadamente al finalizar tu sesión. Estiramientos ligeros y un poco de hidratación son clave para una recuperación óptima. Y recuerda, la consistencia es clave.

No esperes resultados milagrosos de la noche a la mañana, pero con el tiempo y la dedicación, verás mejoras significativas en tu rendimiento.

Seguro que ya sabes que el running es de lo mejor para mantenernos en forma y saludables, pero ¿sabías que también es increíble para los más pequeños de la casa? Aquí te contamos 5 beneficios del running para niños.

  1. Fomenta un estilo de vida activo desde temprana edad: Correr es una gran manera de introducir a los niños en el mundo del ejercicio físico. Les ayuda a desarrollar hábitos saludables que pueden llevar consigo durante toda su vida. Además, ¡es una manera divertida de mantenerlos activos y en movimiento!
  2. Fortalece los músculos y huesos: Cuando los niños corren, están trabajando todos esos músculos y huesos en crecimiento. Esto no solo les ayuda a mantenerse fuertes, sino que también contribuye a un desarrollo óseo saludable.
  3. Mejora la salud cardiovascular: Correr es una excelente forma de mantener sano el corazón. Al practicar este deporte, los niños están fortaleciendo su sistema cardiovascular, lo que les ayuda a tener un corazón fuerte y resistente. ¡Y eso es súper importante para mantenerse saludables y llenos de energía!
  4. Promueve la concentración y el bienestar mental: ¿Sabías que correr puede ayudar a los niños a concentrarse mejor en la escuela? ¡Es cierto! El ejercicio físico libera endorfinas, esas maravillosas hormonas que nos hacen sentir felices y relajados. Así que correr no solo es genial para el cuerpo, ¡sino también para la mente!
  5. Fomenta la socialización y el trabajo en equipo: ¿Qué tal participar en carreras o correr en equipo con otros niños? ¡Es una excelente manera de hacer amigos y desarrollar habilidades sociales! Correr juntos no solo es divertido, sino que también enseña a los niños el valor del trabajo en equipo.

Ahora ya sabes que el running no solo los mantiene activos y saludables, sino que también les ayuda a desarrollar habilidades importantes para la vida. ¡Así que anima a tus pequeños a salir a correr!

¡Nos vemos en la pista, pequeños corredores!

Como cualquier actividad física, el running también conlleva riesgos de lesiones si no prestamos atención. Aquí compartimos contigo, algunos consejos sencillos para evitar esos contratiempos y mantener tus músculos en excelente forma.

1. Calentamiento y estiramiento:

No hay atajo aquí. Antes de lanzarte a la pista, dedica unos minutos a calentar tus músculos con algunos ejercicios de movilidad y un buen estiramiento. Esto preparará tu cuerpo para el desafío que se avecina y reducirá significativamente el riesgo de tirones y esguinces.

2. Incrementa la intensidad gradualmente:

Sé que a veces la emoción del momento puede llevarnos a querer correr a tope desde el principio. Pero la realidad es que tu cuerpo necesita tiempo para adaptarse a las demandas del ejercicio. Así que toma las cosas con calma y aumenta la intensidad y la distancia de manera gradual para evitar sobrecargas y lesiones por sobreuso.

3. Escucha a tu cuerpo:

Tu cuerpo es tu mejor aliado, y te enviará señales cuando algo no está bien. No ignores esos pequeños dolores o molestias; en lugar de eso, detente y evalúa qué está causando el problema. A veces, solo necesitas un descanso o ajustar tu técnica de carrera para evitar lesiones más graves en el futuro.

4. Fortalecimiento muscular y trabajo cruzado:

No te limites solo a correr. Incorpora ejercicios de fortalecimiento muscular en tu rutina, especialmente aquellos que se centran en tus piernas, glúteos y core. Esto ayudará a equilibrar tus grupos musculares y a prevenir lesiones por desequilibrios musculares. Además, considera agregar actividades como la natación o el ciclismo para variar tu entrenamiento y reducir el riesgo de lesiones por sobreuso.

5. Descanso y recuperación:

¡No subestimes el poder del descanso! Tu cuerpo necesita tiempo para recuperarse después de cada carrera. Asegúrate de programar días de descanso activo y días de recuperación en tu semana de entrenamiento. Además, no escatimes en horas de sueño; es durante el descanso cuando tus músculos se reparan y fortalecen, ¡así que dale a tu cuerpo el tiempo que necesita!

6. Nutrición e hidratación adecuada:

Por último, pero no menos importante, asegúrate de alimentar a tu cuerpo con los nutrientes adecuados. Una dieta equilibrada rica en proteínas, carbohidratos, grasas saludables, vitaminas y minerales es esencial para mantener la salud muscular y prevenir lesiones. Y no te olvides de mantenerse hidratado antes, durante y después de tus carreras.

Sigue estos consejos simples pero efectivos, y estarás en camino de disfrutar de kilómetros y kilómetros de pista sin preocupaciones. Recuerda, la clave es escuchar a tu cuerpo, darle el cuidado que se merece y disfrutar cada paso.

¡Nos vemos en la pista!

¿Listos para potenciar su rendimiento y llevar su carrera al siguiente nivel? Hoy vamos a sumergirnos en un aspecto clave del entrenamiento que a menudo se pasa por alto: ¡el entrenamiento de fuerza!

Sabemos que muchos corredores se centran principalmente en sumar kilómetros y mejorar su resistencia aeróbica, pero agregar sesiones de entrenamiento de fuerza a tu rutina puede marcar una gran diferencia en tu desempeño y en la prevención de lesiones.

Aquí tienes 5 beneficios que te harán considerar el entrenamiento de fuerza en tu rutina:

  1. Fortalecimiento muscular: Cuando corres, tus músculos trabajan en conjunto para moverte hacia adelante. El entrenamiento de fuerza ayuda a fortalecer esos músculos, lo que te permite correr más eficientemente y con menos fatiga.
  2. Mejora de la resistencia: No se trata solo de velocidad, sino también de resistencia. El entrenamiento de fuerza mejora la resistencia muscular, lo que te ayuda a mantener tu paso durante distancias más largas sin fatigarte tanto.
  3. Prevención de lesiones: Los corredores a menudo lidian con lesiones como la tendinitis o el síndrome de la cintilla iliotibial. Fortalecer los músculos que rodean las articulaciones puede ayudar a prevenir estas lesiones comunes, manteniéndote en la pista.
  4. Mejora de la técnica de carrera: Un cuerpo más fuerte no solo te permite correr más rápido, sino también de manera más eficiente. El entrenamiento de fuerza puede ayudar a corregir desequilibrios musculares y mejorar tu forma de correr, lo que te hará más rápido y menos propenso a lesiones.
  5. Aumento del metabolismo: El entrenamiento de fuerza no solo te hace más rápido, sino que también puede ayudarte a quemar más calorías incluso en reposo.

Entonces, ¿cuál es la conclusión? No subestimes el poder del entrenamiento de fuerza en tu rutina de running. No solo te hará más fuerte y rápido, sino que también te ayudará a reducir el riesgo de lesiones.

¡Nos vemos en la pista!

Hora de sacudirse las telarañas y volver a la pista, después de esas merecidas vacaciones.

Te dejamos 5 consejos para volver a entrenar:

1. Empieza despacio, pero seguro:

No te exijas demasiado desde el principio. Es importante recordar que tu cuerpo puede necesitar un poco de tiempo para readaptarse al ejercicio regular después de un descanso prolongado. Comienza con sesiones cortas y a un ritmo suave, y aumenta gradualmente la intensidad y la duración a medida que te sientas más cómodo.

2. Establece metas realistas:

No esperes correr un maratón el primer día de estar de vuelta. Establece metas alcanzables y a corto plazo para mantenerte motivado y evitar la frustración.

3. Varía tus rutas y entrenamientos:

Explora nuevas rutas, prueba diferentes tipos de entrenamientos. Esto te ayudará a mantener el interés y a desafiar tu cuerpo de nuevas maneras.

4. Escucha a tu cuerpo:

Nadie conoce tu cuerpo mejor que tú. Si sientes dolor o molestias inusuales, no ignores las señales de advertencia. Descansa cuando sea necesario y no tengas miedo de consultar a un profesional si algo no se siente bien.

5. Celebra tus logros:

Ya sea que hayas corrido un kilómetro más que la semana pasada o rompas tu tiempo personal en una carrera, tómate un momento para celebrar tus logros. Reconocer tu progreso te ayudará a mantenerte motivado y comprometido con tu entrenamiento.

Recuerda, lo más importante es disfrutar del proceso y escuchar a tu cuerpo en el camino. ¡Nos vemos en la pista!

En el marco del día mundial de la salud, queremos resaltar los increíbles beneficios que correr tiene para nuestra salud. Así que, ¿listos para conocer por qué el running es el mejor aliado para sentirnos increíbles?

  1. Fortalece el corazón: Correr es como un entrenamiento de alta resistencia para tu corazón. Con cada zancada, este músculo vital se fortalece, mejorando la circulación sanguínea y reduciendo el riesgo de enfermedades cardiovasculares. ¡Es como darle un abrazo a tu corazón en cada kilómetro recorrido!
  2. Despeja la mente: ¿Qué mejor manera de liberar el estrés y las tensiones acumuladas que salir a correr? El running es como una terapia natural que te permite desconectar del ajetreo diario, liberar endorfinas y mejorar tu estado de ánimo. ¡Una mente clara es clave para una vida saludable!
  3. Fortalece tus huesos y músculos: Cuando corres, no solo estás tonificando tus piernas, ¡sino todo tu cuerpo! Cada paso que das ayuda a fortalecer tus huesos, músculos y articulaciones, previniendo la pérdida de densidad ósea y reduciendo el riesgo de osteoporosis. ¡Así que dale duro al pavimento y construye un cuerpo más fuerte!
  4. Mejora la calidad del sueño: ¿Tienes problemas para conciliar el sueño? ¡El running puede ser la solución que estabas buscando! Estudios han demostrado que hacer ejercicio de forma regular, como correr, puede mejorar la calidad del sueño, ayudándote a dormir más profundamente y despertarte más descansado. ¡Así que corre hacia ese dulce sueño reparador!

En resumen, el running no solo es una actividad física, ¡es un estilo de vida que te llena de energía y vitalidad! ¡Ponte tus tenis, sal a correr y celebra la salud en movimiento!

¡Nos vemos en la pista!